lunes, 30 de agosto de 2010

EL CINE Y MI PUEBLO






Buenos tiempos corren para Baños de la Encina , singular villa donde las haya, y ello debido a un acontecimiento tan especial como raro que en estos días de vacaciones , calor y crisis ha aparecido como soplo de aire fresco en las sufridas almas de mis paisanos los bañuscos.


Si señor , LA INDUSTRIA DEL CINE se ha fijado por fin en Baños y Baños corresponderá como sus gentes saben hacerlo.


Definitivamente la superproducción El capitan Trueno y el Santo Grial tendrá como escenario el castillo de Burgalimar donde se rodaran varias escenas cinematográficas y a mis paisanos como orgullosos figurantes, que por un jornal de 90 euros diarios que dicen que pagan, sin duda no faltaran soldados, presos, cojos y doncellas oriundos de este lugar.


El pasado lunes tuvo lugar en las dependencias del ayuntamiento el casting oficial y de verdad os digo compadres que nunca había visto tanta gente junta en la plaza de la Constitución.


A partir de ese día el pueblo ha sido tomado por una orda de operarios que se alojan en todos los establecimientos hoteleros del pueblo, montadores de escenarios, técnicos de luz, de fotografía, efectos especiales, etc, etc; que están ya trabajando ya en el castillo para el rodaje que empezara la segunda semana de septiembre.



Para mi, esta claro que ademas de los beneficios economicos y de publicidad que implicara esta pelicula para Baños, lo que no tiene precio es que en un futuro cuando veamos la peli en el cine o en la tele podamos flipar distinguiendo entre los soldados los caretos de mis paisanos, eso no tiene precio. ( creo que a Paco Mono lo han seleccionado de preso de galeras)

domingo, 29 de agosto de 2010

RESUMEN SEMANAL

Hola a todos. Esta semana de vacaciones para muchos ha estado marcada en el blog, como en semanas anteriores, por las entradas fantasma, y es que los calores sofocantes, las terrazas de verano, las fiestas patronales y algún que otro asunto del otro jueves, nos despistan las neuronas hacia el desenfreno, el frenesí, las tosferina o el mayor de los descansos y letargos. Esperemos que con la llegada de Septiembre recuperemos nuestro hábitat, nuestro espíritu DIARIANTE, y el devenir de los acontecimientos diarios, que seguro que no faltarán, alimenta nuestras musas y nuestro recio verbo.

No obstante, en la última semana ha habido DIARIANTES que nos han regalado una entrada y a las que dedicaré un espacio en este resumen semanal:

-El martes, Sir Erik, nos dejó una historia de su cosecha, conmovedora y trágica, pero con final feliz. Nos llevó a una época de persecución, injusticias y miedo. Finalmente, el amor por los nuestros, el afán de superación y la fortaleza humana hicieron que su protagonista encontrara todo lo que podía desear en la mal llamada Palestina.

-El miércoles y el viernes se caracterizaron por la fiebre. El miércoles fue Pedrito, mi "zegal", que debido al calentón nos hizo vivir las más alocadas aventuras. El viernes, su onda expansiva llegó a Vicente, que cuando tan ricamente se disponía a disfrutar de la feria, tuvo que conjurarse al ibuprofeno y al "paracelamor" con algunos grados de más. Esperemos que ya estés mejor. Pedro se ha recuperado totalmente, ya está hecho un zascandil.

Poco más DIARIANTES. Para los que nos dedicamos a la educación, recordad, el mes de Septiembre, por incómodo que parezca, es el mejor del año: es el mes que está más lejos del próximo mes de Septiembre. Ánimo y al toro.


viernes, 27 de agosto de 2010

ONDA EXPANSIVA

El otro día me partía de risa con la historia de Pedrito y todo lo que se había formado por su alta temperatura.
Hace un rato he vuelto a acordarme, pero ahora sin reirme.
A las ocho de la tarde me disponía a salir con mi mujer y ni niña a disfrutar del primer día de feria, de la primera cabalgata con mi niña...
Al acabar la cabalgata hemos ido a tomar una cerveza para sofocar el calor del día, pero poco a poco empiezo a sentirme mal.
Dolor de cabeza, dolor de tripa, espalda, piernas, hombros... llamaradas en la cabeza.
Le comento a mi esposa la situación y me propone volver a casa.
Cuando llegamos a casa, diligente mi esposa me pone el termómetro. 38,6º C marca el aparato.
Y yo me pregunto. ¿Tan grande puede llegar a ser la Onda Expansiva de un bebé, o estamos ante una nueva forma de propagar virus?
Vamos a tener cuidado con lo que hablamos por estos lares, porque los virus informáticos empiezan a atacar a los humanos.
Os dejo, tengo en la mano un litro de Aquarius y en la mesa una tableta de paracetamol, otra de ibuprofeno y mi amigo el termómetro.

Hiru-

jueves, 26 de agosto de 2010

El Volunto

En primer lugar, disculpas por la tardanza de mi entrada, programada para el 26 de Agosto, pero no he estado disponible durante 8 días a causa de un volunto.
La cosa es que era pasado mediados de agosto, cuando derrepente, creo que era domingo, surgió la penosa conversación entre mi señora y yo de "bueno, ya solo queda la feria... se acaban las vacaciones, la vuelta al (precario) currele, etc", cuando de lo más hondo de mi ser saltó una chispa que hico algún cortocircuito, que a su vez provocó una considerable subida de tensión y que churrascó unas trescientas neuronas, haciendo que pronunciara una frase de la que puedo asegurar que no me arrepiento: "Pues vámonos de viaje".
A esto, no podía si no recibir una incrédula mirada y más que justificada subida de ceja derecha por parte de mi señora. Y pronuncia ella: "pero... ¿a dónde?".

Yo, aunque corto y perezoso, debo recordar que aun estaba bajo el influjo del fallo neuronal, pues dije: "Yo que sé, mira ofertas por Egipto".

Pues nada, topamos con una de esas ofertas de última hora, nos fuimos a Gisela (Imagina Viajes) a ver si podía gestionarla, que dice que sí, que nos saquemos los pasaportes llorando a los policías para que nos eviten la espera de 40 días de cita previa, pin pan pun, bocadillo de atún.

El volunto, amigos, el mayor enemigo de la planificación, que puede salir muy bien o muy mal. En nuestro caso, hubo de todo, pero esa maravillosa historia os la pienso contar por fascículos, por que tengo mucha reflexión que transmitir.

Abrazos a todos.

miércoles, 25 de agosto de 2010

Fiebre

La ola de calor que abrasa algunas provincias españolas ha tenido efectos inmediatos en mi Pedrito. El tío lleva tres días con 39 en la cuna, de fiebre, y amenaza con quemar el piso. El otro día, al dejarlo en la maquita para que viese sus dibujos matinales, hizo arder la tela de la misma y cayó al suelo como si desde un anfiteatro se tratase. No contento con esta hazaña, derritió las baldosas de gres y apareció en el salón de la vecina del primero para, poco después, tras derretir también sus porcelánico, precipitarse sobre un coche aparcado en la cochera de Carrasco. 

Visto el incidente, inmediatamente después nos acercamos al hospital para exponerle a personal  especializado las circunstancias térmicas que acompañaban a nuestro querido hijo en las últimas horas. Lo primero que hicieron fue colocar un extintor en la cama de "boxes" donde nos aislaron, llamaron a un camión extragrande del parque de bomberos de la Avenida de San Sebastián que, junto con un avión del INFOCA cargado con agua del Pantano de Baños, esperaban para sofocar cualquier conato de incendio. Un médico, con barba, una enfermera rubia de grandes tetas y un celador cojo aparecieron semidesnudos, con toalla a la cintura y se colaron en nuestro "box" en conversación muy animada. Pedro acababa de convertirlo en una sauna. A los pocos minutos el médico de barba y la enfermera rubia murieron deshidratados. El cojo pudo salir por su propio pie.

Tras los respectivos pésames, Lucía y yo decidimos abandonar el hospital para dirigirnos a un lugar más seguro: alquilamos un cortijo abandonado en Tabernas (Almería) para evitar cualquier catástrofe personal y ambiental fruto del generoso número de grados de nuestro retoño. Pero antes de llegar nos paramos en un Mercadona donde decidimos comprar algo de comer y .... al pasar por la sección de barbacoa el calor de Pedro prendió el estante de pastillas de encender y tuvimos que abandonar Almería por la Alpujarra, escondiéndonos como los moriscos en su día y sentando a Pedro en cada nevero que encontrábamos al paso para sofocar su ansia calorífica.

Finalmente, los medios de comunicación se hicieron eco de tal fenómeno y hemos recibido múltiples ofertas de SOLAR, BRAUN, LG, ... que quieren convertir a Pedro en bomba de calor, tostador, calefactor o barbacoa portátil. Estamos pensándonos qué opción será la más conveniente.

Por lo pronto, ahora mismo, lo tengo viendo sus dibujos en la maquita, remendada con hormigón, y con una bombona de 150 litros de APIRETAL a su diestra.

Los virus, DIARIANTES, los virus.

Salud amigos.

martes, 24 de agosto de 2010

HISTORIA CONMOVEDORA

Hola amigos, os presento otra de mis creaciones, de mis minirelatos, es un poco largo, pero con un poco de paciencia veréis que la historia merece la pena pues está cuidada al detalle en fechas y momento histórico y con un final feliz...es de mis favoritas, ahí queda:

Me llamo Tuvia Cohen, ahora tengo 69 años, pero no siempre fui un viejo. Aunque no te lo creas, yo también tuve los 30 años e incluso 9 años, la misma edad que tú puedas tener ahora, de hecho con esa edad me ocurrió algo que compartiré ahora contigo.
Me remonto al año 1942, los nazis estaban en plena solución final contra nosotros, los judíos. Yo era tan solo un infante de 9 años, pero recuerdo perfectamente aquel suceso. Yo me encontraba viviendo con una familia alemana amigos de mis padres. Esta familia, pese a ser Alemanes no entendían de racismo, eran de los pocos alemanes que también nos veían a los judíos como lo que éramos, seres humanos. Esto parece una simpleza, pues todas las personas son sin lugar a dudas eso, seres humanos. Pero creedme, no siempre ha sido así, y no siempre ha sido con nosotros.

Por alguna extraña razón que desconozco, mi padre siempre me contaba historias acerca de las persecuciones que habían sufrido nuestros antepasados y no sólo me refiero a los tiempos bíblicos, ni siquiera a tiempos ancestrales, no que va, me refiero a tiempos relativamente modernos, como los pogroms en Rusia. “Algo tenemos distinto a los demás hijo” me decía siempre mi padre, es de las muchas cosas que recuerdo de él.

Mis padres biológicos habían ido de viaje en tren y antes de irse una madrugada me levantaron con mucha urgencia y me llevaron con esta familia alemana que me adoptaron rápidamente y me cambiaron el nombre con el que hoy me he presentando por el de Herman Jenssen. Más tarde comprendí que mis padres no se fueron de viaje sino que se los llevaron a un campo de concentración para nunca más volver. No pretendo recrearme con esto, fue algo muy duro para mí y ni tan siquiera contarlo me ayuda, pero dejadme a cambio que os diga lo tremendamente orgulloso que me siento de mis padres, ellos me dieron dos veces la vida, una al nacer y otra al librarme del holocausto.

Pero bueno, sigo, resulta que al principio yo, como buen niño enmadrado echaba mucho de menos a mis padres, pero los Jenssen se portaban muy bien conmigo, me trataban sin distinción alguna entre sus otros hijos, tanto es así, que incluso mejor que a sus hijos diría yo pues el pedazo de pastel mas delicioso era siempre para mí, la porción más grande del bistec me lo servían siempre a mí, etc., mas tarde entendería también que era producto de un sentimiento de culpabilidad por lo que sus compatriotas alemanes nos habían hecho a los judíos y en concreto también a mis padres.

Resulta que todo marchaba bien y tras un año y medio con los Jenssen, un buen día unos señores altos, fornidos, bien trajeados, con un gorro que daba mucho miedo pues tenía en el centro una insignia en forma de calavera con unas letras que parecían dos eses, con cara de muy pocos amigos se presentaron en la casa de los Jenssen. Otto, el cabeza de familia, me indicó que debía meterme en el desván corriendo y que estuviese completamente en silencio, el jamás me había alzado la voz pero ese día estaba histérico. Yo lo hice sin vacilar. Cuando esos señores entraron al salón de la casa, La mujer de Otto, la señora Beatrice, les ofreció un café, o un té, pero ellos lo rehusaron muy seriamente, por mucha amabilidad que les ofreciese parecían inmunes a ello, como si no tuvieran sentimientos, gélidos por dentro tanto como el tiempo que hacía fuera en la calle.

Uno de ellos de repente dijo, figura en el libro de familia que ustedes adoptaron un hijo alemán huérfano hace un año y medio no es así?; Sí, respondió con voz temblorosa Otto. Pues quisiéramos verle para una revisión rutinaria. Otto sabía que en el momento en que me auscultaran verían realizada en mis partes la señal del pacto entre D-os y su pueblo que mis padres biológicos me hicieron al nacer, pues aunque no lo había comentado, mi padre se llamaba Aarón Levi Cohen, y era un levita y un Mohel, es decir, rabino y médico encargado de realizar las circuncisiones. Mi mamá se llamaba Noahchim, pero todos le decíamos Noah y era una mujer bellísima y lo mejor de todo, su principal labor en la vida éramos nosotros, mi padre y yo.
Por donde iba, ah sí, pues resulta que el señor Otto Jenssen dijo que había salido a clases particulares y que volvería tarde, los oficiales de las SS no muy convencidos dijeron que pasarían mañana a la misma hora y que por el bien de toda la familia era mejor que estuviese yo en casa. Ellos habían oído rumores de casos en los que judíos daban a sus hijos en adopción a Polacos Y Alemanes para que los cuidasen y salvar así sus vidas, y querían comprobar si yo era uno de esos ejemplos.

Otto y Beatrice asustados comentaron que lo mejor sería mandarme a casa de un amigo de Otto en Manchester para que ellos a su vez me mandaran a uno de esos barcos con destino a la mal llamada Palestina que zarpaban casi a diario desde Inglaterra. Y así lo hicieron, pagaron mucho dinero para que un adulto me acompañase desde Alemania a Manchester y después otro montón de dinero para pagar el barco hasta Israel. Jamás pude entender todo esto hasta que me hice adulto, sino hubiese hecho más por los Jenssen y se lo hubiera pagado mucho mejor de algún modo.

Solo y asustado llegué a esa tierra de la que mis padres tanto hablaban, aquella con la que me contaban historias para poder dormir, pensé, ojalá mi padre pudiera ver esto, es Jerusalén, la capital de la tierra prometida. Con tan solo 10 años, fui mandado a un kibutz al norte, Rishon le Zion se llamaba, y allí me enseñaron el hebreo escrito y pude estudiar y aprender varios oficios. Cuando terminé mis estudios en la universidad hebrea de Jerusalén, allá por el año 1967 acaba de estallar la guerra de los seis días, y pese a que Israel estaba solo, como yo, ganó la batalla a la vida y al mundo, curiosamente como yo. De hecho, he pensado muchas veces que yo debí haberme llamado Israel y estoy seguro que si mis padres hubieran sabido todo esto, así me hubiesen llamado.
Total, cuando la guerra acabó, Israel estaba necesitado de potentes diplomáticos que hablasen alemán, y como yo aun lo recordaba me llamaron para formar parte del gobierno de Israel.
Yo como podéis imaginar dije que sí sin dudar. Así que me citaron para esa misma semana en la Knesset, y yo con los nervios propios de un chiquillo fui rápidamente, tan rápidamente que me equivoqué de día y me presenté un día antes. Al llegar, un hombre alto me recibió en su despacho, y el caso que a mí me sonaba su cara pero con lo nervioso que estaba no caí en la cuenta de quién era, pero de repente alguien tocó a la puerta del despacho donde estábamos ese hombre alto y yo sentados, y dijo. Señor Eshkol quería decirle que…, disculpe señor, no sabía que estaba usted ocupado… y se marchó. Al son del cerrar de la puerta caí en la cuenta, era el mismísimo Levi Eshkol, primer ministro de Israel que nos había dado la victoria en la reciente guerra denominada después como la de los seis día. Casi pierdo el conocimiento al enterarme, tan pálido me puse que el señor Eshkol me ofreció agua y me dijo: Estás bien chico?. Tartamudeando me salió algo parecido a un Sí, que se parecía más a un ssss, pero que se entendió perfectamente. Tras reponerme un poco, le expliqué para que había ido y el me dijo: Le estábamos esperando señor Cohen. Desde ese día pase a formar parte del consejo de ministros.
Poco a poco fue pasando el tiempo y me iba consolidando en el puesto, además hice algunas amistades, particularmente entablé especial amistad con una vieja gruñona pero sumamente persuasiva, se llamaba Golda Meir. Esta señora en los postreros años llegó a ser primer ministro en Israel, la única mujer hasta ahora que logró semejante hecho. Y Como yo era amigo de ella, pues seguí formando parte del gobierno como ministro de Igualdad.
Un día paseando por Jerusalén camino del kotel, vi a una persona, de aspecto anciano, acompañada de otra aun más anciana con un cartel en un idioma muy de moda en Israel y que había surgido hacía relativamente poco tiempo, era el yiddish, el cartel decía: busco a mi hijo. Yo como sabía hebreo y alemán pude interpretarlo, pues el yidish es una mezcla entre hebreo y alemán.

Me acerqué a él y pregunté al hombre, busca usted a su hijo?, y él me respondió Sí. Pues está usted de suerte, creo que podré ayudarle, soy ministro de Igualdad y tengo acceso a los archivos de las familias de éste joven país. Si usted me apunta en un papel sus apellidos podré ayudarle a encontrarlo, entonces, el otro anciano que estaba junto al del cartel lo interrumpió y dijo, también es mi hijo. Entonces yo me preocupé, (hijo de dos hombres no podía ser), y pensé, son dos locos con el síndrome de Jerusalén y yo les he dado carrete, pero bueno me apuntaron los apellidos en el papel y yo sin mirarlo lo metí en mi bolsillo. Les pregunté a los ancianos, tienen ustedes donde alojarse?, y ellos me respondieron No. Yo entonces los llevé al Albergue comedor municipal y los dejé allí.

Por la tarde cuando llegué a la oficina fui a sacar una moneda del bolsillo para tomar café y saqué el papel que me habían dado los ancianos y que yo lo tenía ya olvidado. Y pensé, bueno, qué diantres, me pica la curiosidad, vamos a intentarlo, en el caso de que fuese de algún modo cierto ningún padre debería estar sin su hijo. Al mirar el papel quedé aún mas blanco que cuando vi a Levi Eshkol. Decía el papel. “Mi hijo se llama Tuvia Cohen”, y justo debajo ponía: “y el mío se llama Herman Jenssen”. Las lágrimas empezaron a brotar de mis mejillas sin poder contenerlas, y seguí leyendo como pude, decía: “nuestros nombres son Aarón Levi Cohen y Otto Jenssen”. Cogí rápidamente el abrigo y marché corriendo al albergue municipal. Cuando llegué, vi en los ojos de mis padres que ellos ya sabían quién era yo desde el principio. Y los abracé con toda la fuerza que pude y me los llevé a mi casa. Lo siguiente que hice fue tramitarles la ciudadanía y el pasaporte Israelí y proporcionales mi hogar como apadrinamiento para ello.
Después me contaron sus historias, resulta que cuando los Rusos liberaron Auszchwitz en Enero de 1945, mi padre aún seguía vivo, no así mi madre, pues ella no desarrollaba el trabajo de un hombre y simplemente la gasearon. Al salir de Auszchwitz, no tenía ni dinero ni fuerzas, pero sí un objetivo: Buscarme. Así que se dirigió a casa de los Jenssen, al llegar allí tiempo después descubrió todo lo que había ocurrido, Otto se lo contó, y le contó también algo que yo no sabía, y es que cuando los oficiales llegaron al día siguiente a por mí y vieron que no estaba, como castigo, se llevaron a los hijos y la mujer de Otto, a Beatrice, y Otto entró en una profunda depresión, depresión que mi padre biológico Aarón Levi le ayudó a superar gracias a sus conocimientos filosóficos de la Torah y el Talmud. Y Ahora por fin, tantos años después, juntaron el suficiente dinero y decidieron venir a buscarme. Y hoy después de éste tortuoso destino heme aquí, con mis padres, aun cuando todo estaba ya perdido, he vuelto a nacer, podía un padre dar la vida 2 veces a un hijo?, pues con ésta ya iban tres.

Le puedo garantizar al que me esté leyendo que uno no sabe lo que es la vida, el amor y sobre todo la felicidad, hasta que algo así le sucede, es en ese instante cuando todo cobra nuevamente vida y cuando puedo decir claramente y en voz alta que Einstein se equivocaba, D-os si juega a los dados, lo que ocurre es que se reserva la mejor tirada para el final.

domingo, 22 de agosto de 2010

RESUMEN SEMANAL

Cuantas ganas tengo de conocerte, Sir Erik. Cono siempre tus escritos me fascinan. Tenemos tantas cosas en común sobre nuestras creencias, que yo como tú , también necesito sacarlas, y lo haré. Estoy absolutamente deacuerdo con todas tus reflexiones y tú Fe, y estoy deacuerdo en todo lo que comentas de que es Fe. Yo hice una reflexión en mi primer escrito de lo que era desear y sentir en positivo, y aquello que comenté es Fe y se cumple. Si es cierto, siempre se la hecha la culpa a Dios de lo Malo y ¿quién da gracias por lo bueno?
Somos tan libres y él nos hizo tan libres, que somos libres hasta de creer o no creer en él, ¡es la ostia! ¿verdad?
Yo también creo en el altísimo y único Dios verdadero, pero soy tan chico e ignorante que me tuvo que mandar a su hijo, Jesucristo, para que pudiera creer más y mejor, y siempre de la mano de su Madre bendita, que es también madre mia, María.

Un abrazo muy grande a todos y a tí ,en especial, Sir Erik.

RESUMEN SEMANAL

Hola compañeros, por fín el niño perdido ha aparecido en vuestras vidas otra vez, bien tarde, pero aquí ¡coño!

Cuando mi amigo Martineli ha escrito este cuentecillo, ¡sí! me ha hecho volver a mi infancia, cuando los cuentos de la tele, libros o mayores te tenian en ascuas, no se si por el cuento o historia en sí, o por lo que creo que es verdaderamente importante, lo que te enseñaba de la vida , que casi siempre era y es verdad, las magníficas moralejas que ya no se divulgan al final de los cuentos como antes, no se si por pereza de los autores o ma´s grave aún por que creo que no se escriben cuentos. ¡Que increible instrumento de imaginación y aprendizaje se están perdiendo nuestros niños! gracias amigo Martineli por deleitarnos con esta historia sencilla pero tan rica.
¡Que viva el calor y la mierda, como la que hay en nuestra Andalucía! eso sí que nadie me toque esta bendita tierra, que aunque algunos la tengan como una mierda, es LA MEJOR MIERDA DEL MUNDO!

jueves, 19 de agosto de 2010

¿DISTANCIA?

Lunes 16 de agosto de 2010. Cinco y media de la tarde. Centro Comercial "La Plaza" de Ayamonte.
Calle de los caldos extraídos de la uva en el Mercadona del Centro Comercial, alcanzando una botella de Diamante, alguien me toca la espalda, al tiempo que escucho "Qué hace usted aquí, D. Vicente de los Ríos...".
La inmediata de mi cuerpo ante semejante cóctel de sensaciones, fue girarse. Al levantar la vista con el entrecejo fruncido mientras pensaba "quién carajo me conoce a mí aquí", me encuentro con él. Jesús. Buena gente y buen hombre. Una hormiguita trabajadora con un montón de sueños en la cabeza, que estoy convencido que más temprano que tarde será capaz de llevar a cabo.
Jesús es una de esas personas que conoces y no olvidas aunque pasen meses y años hasta que vuelvas a encontrártelas, por su buen y bien hacer, por su nobleza, inocencia, constancia y sacrificio. Fue compañero de largas, aunque amenas tardes de sábados durante el período comprendido entre octubre de 2008 y mayo de 2009.
Tras un rato de conversación poniéndonos al día de nuestras respectivas vidas, nos alejamos, deseándonos lo mejor para el futuro, y como no, dándome recuerdos para ese gran maestro al que admira, Agustín.
Tras cuatro horas de coche, que son una hartá de metros y no te digo ná, si de pasos hablamos, queda demostrado que allá donde vayas, siempre encontrarás alguien conocido, y casi siempre, y en este caso sí que lo ha sido, te alegrarás de haberlo visto.
Llegó el fin del plazo bueno, compañeros.
Saludos Diariantes.

Hiru-

miércoles, 18 de agosto de 2010

El Camachuelo Trompetero

Érase una vez un pajaruco africano llamado Camachuelo Trompetero. Nació de un huevecillo, creció y se hizo adulto. Era feliz en su tierra, que era África. Pero durante casi todo el año hacía mucho, mucho, mucho calor.
Un buen día, decidió irse lejos, lo más lejos que pudiera, hacia el norte. Quería dejar de tener calor y estaba dispuesto a todo con tal de conseguirlo.
Amaneció, bebió un poco de agua, la última vez que lo haría allí, pensó. Echó a volar, subió tan alto como pudo y empezó su viaje hacia el norte.
El viaje era largo, las jornadas, eternas. Pero pronto empezó a notar el cambio: aire fresco, humedad, grandes nubes.
Sin embargo, su felicidad se vio troncada con los vientos helados. Nunca jamás habría imaginado una temperatura tan baja. Comenzó a congelarse y momentos depués cayó en picado, exahusto. Consiguió planear en el último instante y con la nieve se amortiguó el golpe. La nieve cubrió su pequeño cuerpo hasta que desapareció bajo ella.
Todo parecía perdido, pero un Gamo aparecío en escena, con un empacho de malas hierbas que le estaban provocando unos retortijones de órdago. Sin poder evitarlo, una cascada de mierda de Gamo le chorreó desde el ojete de Gamo por la patas hasta empezar a acumularse sobre la nieve, justo donde nuestro protagonista africano yacía sepultado.
Pronto el calorcico empezó a derretir la nieve y el Camachuelo poco a poco fue recobrando el color, y tal fue la alegría de haber sobrevivido que empezó a cavar en la mierda hacia arriba, sacar su cabeza a la superficie e iniciar un canto de alegría como jamás se había escuchado en aquellas tierras.
Por desgracia, un oso que también pasaba por allí, esuchó su canto y con su zarpa trincó al pájaro sacándolo de la mierda y echándoselo directamente a la boca.

FIN

Moraleja 1: no todo el que se caga en tí es tu enemigo, ni el que te saca de la mierda tu amigo.
Moraleja 2: Cuando tengas un tremendo golpe de suerte en la vida, mejor no vacilar y mantener el pico cerrado.

Nota: esta historia está basada en alguna otra que relataron en alguna película que no recuerdo, pero que me hizo gracia.

martes, 17 de agosto de 2010

El relente

En casa de mis padres el relente constituye un gran problema. Las controversias alrededor de tan majestuoso fenómeno atmosférico conducen a verdaderas batallas campales que nada tienen que envidiarle a la lucha por el mando a distancia de la tele. Todos los que por allí, de vez en cuando, nos acercamos, asistimos perplejos a la dialéctica fina y fluida, en un primer momento, y cicatera y desvergonzada conforme la disputa va separando irreductiblemente las posiciones.

El caso es que mi padre, con una edad y de testarudez a prueba de bombas, se considera un detractor aventajado del uso del aire acondicionado, incluso en las condiciones más exigentes. Por su parte, mi madre, con un poquito más de cordura en el trato pero de testarudez también destacable, sufre de sofocos propios de la edad y durante las noches necesita de un soplo de aire fresco adicional al que mi padre siente desde la ventana del cuarto de ambos. A decir verdad, lo que mi padre denomina el relente, protagonista de esta entrada, no es más que el Casper de los “fresquitos”, una corriente de aire fantasma, un deseo más que un respiro real frente al calor infumable de los últimos días. El relente podría definirse como ese aire, que se supone que pasa por la ventana, y ahoga las posibilidades de poner el “cacharro de la pared” aunque sea a 28.

-“Yo ya se lo he dicho por activa y por pasiva” - dice mi Madre - “… pero es que una noche me va a dar un sofoco que me va a llevar” – completa.

-“No, si al final, tendremos que poner el cacharro ese, morirnos de frío e ir al de los huesos en cuanto se termine el verano”- argumenta mi padre - “si lo sabré yo, porque, además, han dicho en Salud al día que reseca las vías respiratorias.” - apostilla finalmente.

-“Mira Agustín, lo que tú quieras, enterrá en vida me tienes” - lamenta mi madre.

Aquí os los dejo, DIARIANTES, sumidos en una verdadera guerra que terminará con los primeros fríos, porque para las bajas temperaturas, todos sabemos arrimarnos al de al lado.

Buen clima, amigos.

lunes, 16 de agosto de 2010

QUE ES LA FE????


¿QUE ES LA FE?

“La fe es la certeza de lo que se espera, la convicción de lo que no se ve”. Así define la Biblia lo que es la fe, sí señores, habéis leído bien, he dicho Biblia, y por decirlo no se ha roto vuestro ordenador ni yo me he transformado en una zombi come sesos. Para el que le suene un poco, la Biblia es ese libro que todas las madres guardan en sus casas y que muchos aún tenemos, es el libro más leído y vendido del mundo, pero del que no se puede sacar pecho por hacerlo por estar, en estos tiempos, mal visto.

Quiero simplemente que os preguntéis qué haríais sin fe, cada uno de vosotros utiliza la fe para todo. Cuando salís con el coche y tenéis la esperanza de llegar a vuestro destino a salvo, eso es fe, pues confiáis en ello aun cuando existen múltiples variables cómo los demás vehículos, el mal tiempo, etc etc, que no dependen de vosotros. Cuando queréis hacer algo y os motiváis vosotros mismos con exclamaciones del tipo “vamos coño que yo puedo”, eso es fe, porque tenéis fe en vosotros mismos, no podemos controlar lo que sucede a nuestro alrededor y sin embargo tenemos fe de que todo siempre va a salir bien. Cuando algún ser querido está en el hospital y nosotros pensamos que se va a recuperar porque queremos que así suceda, estamos teniendo fe, pues no entendemos un carajo de medicina, no podemos hacer nada salvo esperar, y sin embargo pedimos al viento que todo salga bien.

Hay pocas cosas de las que estoy seguro, y una de ellas para mí, es que la fe en Dios me ayuda a ser mejor persona, me da paz en los momentos de angustia, y pese a que muchos ignoren ese significado, dejadme que os cuente algunas de las cosas que me motivan a seguir haciéndolo:
Yo respeto absolutamente todas las creencias aunque no esté de acuerdo con ellas, y no sé qué pensarán los demás, pero yo sí puedo decir que nunca he caminado solo, y esto no es un fragmento del “you´ll never walk alone”, no, es la realidad. Claro que no soy una excepción, como todo el mundo tengo y tendré mis malos momentos, pero se discernir en que superarlos me hará mejor y más fuerte y sé discernir en que por ello suceden. No hay cosa que peor lleve, que el clásico ignorante exclamando: ¿Y si existe Dios por qué hay hambre en el mundo?, ¿Por qué existen las guerras?...esas preguntas me hacen mucha gracia, pero os daré mi respuesta, Dios no hace las guerras, Dios no quita el alimento ni se lo niega a nadie, somos nosotros, el ser humano y su egoísmo, el ser humano y sus intereses estratégicos, comerciales o cualesquiera otros., tal y como yo lo veo, Dios nos da libre albedrío para que seamos capaces de elegir el camino, de este modo jamás podremos poner escusas cuando se nos juzgue.

Mirad, por suerte o por desgracia he compartido mesa y he tenido la suerte de reunirme con personas importantes e influyentes de éste y otros países, y creedme, ninguno de ellos nunca se atreve a hacer esas preguntas, ellos saben perfectamente qué mueve las guerras y por qué nadie para de una vez el hambre en África y os aseguro que Dios no tiene nada que ver. Eso sí, estoy completamente seguro que Dios reclamará responsabilidades a quienes pudieron y no quisieron.
Pero una cosa es cierta, yo, creyendo y teniendo fe no pierdo nada, sin embargo haciéndolo, si realmente existe todo lo que dice la Biblia, tengo mucho que ganar, y eso amigos, solo por pura lógica merece la pena al menos intentarlo.

Desconozco si la fe mueve montañas, pero sí mueve a las personas y hace a los hombres lo que son, y yo, Sir Erik de Guarromán, soy a todos los efectos, un hombre de fe, y deseo al menos, llevar mi vida en esa dirección, y si estoy o no equivocado el tiempo lo dirá, sólo espero que todos estemos allí para verlo.

Y mientras espero, mi fe hace mi vida un poco menos complicada, los malos momentos son menos malos y me gusta pensar que todo lo que tengo y todo lo que soy y lo que puedo llegar a ser no es por mí, sino porque Dios quiere. Así pues, doy siempre gracias a Dios, y seguiré luchando para no salirme de mi camino, del que, hasta la fecha, me siento llevado sin grandes esfuerzos y con muchas recompensas.

Para finalizar permitidme que os deje esta reflexión:

“Reconocer que tengo y que siempre tendré un Superior me otorgar respeto, me enseña disciplina, humildad y elimina mi soberbia. Reconocer que tengo siempre un Superior me da esperanza, siempre me permite ver el vaso medio lleno, me permite creer en algo cuando todo parece perdido, pero sobre todo me permite confiar en El y dejarle hacer, pues sé que tarde o temprano, me da lo que necesito. Reconocer que tengo un Superior me enseña y me enseñará a no temer nunca a la oscuridad y a ver siempre el lado bueno de las cosas aunque en el momento no las veas. Y reconocer a un Superior me enseña y me enseñará que al menos, intentándolo, habré sido y lo habré hecho un poquito mejor, pues en definitiva he aprendido a no rendirme. Reconocer a Dios como mi superior, puedo decir, me ha hecho lo que soy.
“Si Einstein o Freud así lo creían, ¿por qué no yo?”

Sir Erik de Guarromán, nunca un guarro pero sí un Man.


P.d.: Perdonad por las tildes del escrito anterior, tengo el teclado en anglosajon....vaya tela...jajaja

RESUMEN SEMANAL

LUNES 9 DE AGOSTO

Pequeñito o SIR AGUSTIN nos deleita con un pensamiento dado por la lectura de su libro en la que un filosofo llamado Giordano Bruno posee una teoria interesante a la par que conflictiva en ideales. Mi humilde opinion es que la existencia de la Dios y su omnipotencia queda fuera de toda duda. Por ejemplo, como explicamos que poseemos de manera innata la condicion de discernir el bien del mal, o que si realmente venimos del mono no nos sirven sus organos para trasplantes y si los del cerdo...¿acaso ahora diran que venimos del cochino?...no se, es un tema digno de debate...Bravo SIR AGUSTIN.

MARTES 10 DE AGOSTO

Poema del gran Martinelli en la que destaca el poderio y el desspiporre de su esposa los findes, graciosa, curiosa y....al mismo tiempo...reflexiva....yo quiero una asi tambien....jajajajjaa...ese es el poder de los 20 y tantos...ahora en serio, espero que tengas muuuuuchas aventuras mas que disfrutar con ella.

MIERCOLES 11 DE AGOSTO

Vicente nos deleita con una reflesion al mas puro estilo shakespiriano...realmente me hizo pensar y reflesionar sobre muchas cosas, cargada de pesimismo estaba tu entrada, pero dejame que te diga que cuando uno llega al punto depre mas bajo ya solo queda una cosa por hacer...subir!!!

EL RESTO

Son tos unos maricones por no escribir y saltarse sus deberes hombre!!

miércoles, 11 de agosto de 2010

VACÍO

Oscuridad, pesimismo, negación, no poder, o querer, ver más de lo que tienes justo delante.
Es una sensación de vacío, y de estar lleno al mismo tiempo. Necesidad de estar solo. Un nudo en la garganta.
Todo lo que oyes, hueles, sientes y ves, te recuerda que tienes dentro de tí un sentimiento y una necesidad, llorar.
No ves solución. O sí, pero quizá no te guste.
Se escapa una lágrima. La quitas con el dedo. Un suspiro. Intentas empezar a pensar en otra cosa.
Cambias de actividad. Soy joven, tengo proyectos, futuro. Nudo en la garganta.
¿Por qué?

Hiru-

martes, 10 de agosto de 2010

Beatrí

Beatrí
mira que la luna se vá
acuéstate ya

Beatrí
cada noche es una aventura
que nos contarás

Dime dónde hay una feria
cuantas copas te has tomado
cuanto tiempo ya bailando
dime cómo has aguantado

Beatrí
mira la cara del Martín
se quiere acostar

Beatrí
cada noche es una aventura
que nos contarás

Dime qué Bar has cerrado
dónde vas con tu amigos
son las 6 de la mañana
se te duerme tu marido

Beatrí
mira que la luna se vá
acuéstate ya

Beatrí
cada noche es una aventura
que nos contarás

Beatrí
cuanta tapa que comer
cuantos "pabs" a los que ir
junto a tí
Beatrí

Por que a mi señora le gusta la parranda y las ferias tanto (o más) que un servidor. Canción basada en la música y melodía de Ending de David el Gnomo, serie animada donde las haya. Adjunto video.


lunes, 9 de agosto de 2010

Giordano Bruno

Inmerso en el fragor de la rutina que ofrece una semana rural en las altas cumbres, repletas de enigmáticos cerezos, de Sierra Mágina, la página 82 de mi ansiada y reposada lectura me muestra a Giordano Bruno. El tal Giordano, filósofo italiano del siglo dieciséis, sostenía una teoría, como buen filósofo, descarriada pero interesante: afirmaba que si Dios es infinito, y sus poderes también lo son, entonces debe haber un número infinito de mundos.

Maldito sea, me hizo parar: un número infinito de mundos, con infinidad de personas, infinitos tiempos y espacios, infinitos libros y hasta infinitos garitos donde tapear con cerveza fresquita y vino de infinitas denominaciones. Maravilloso. Pero, es poco plausible ¿Quién va a creerse que existan infinitos mundos? Por lo pronto puedo recordar algunos títulos en literatura y cine que se hacen eco de esta inextricable propuesta. Junto a ellos, las religiones también nos proponen otro mundo, paralelo al nuestro, donde descansaremos después de nuestra tortuosa o maravillosa vida. Igual la propuesta no es tan voluble e inconsistente. ¿Qué pensáis?

Pero lo que más me gustó fue imaginar la posibilidad de alternar un mundo con otro en tiempo real. Imaginaos, estamos aquí y decidimos viajar (gracias a algún tipo de pastilla o conjuro cicatero) a otro mundo, cualquiera de los existentes, a ser jugadores de fútbol de élite, presidentes del gobierno o prostitutas de grandes tetas, rubicundas y lascivas (estas últimas dos opciones se refieren casi a lo mismo). Después, cuando ya estuviéramos cansados de ganar títulos, robar dinero y recibir empellones más o menos acertados, pastillita o conjuro y de vuelta a nuestra rutina, un segundo después, como si nada hubiera pasado ¡¡joder, qué pasada!!

Amigo Giordano, me has conmovido. Comencé reflexionando sobre qué quería ser y qué mundo me ofrecería esa posibilidad; pensé en dónde querría estar, en qué época y el conjuro para hacerlo posible; divagué por el análisis de ventajas e inconvenientes de cada opción y, así, se me fue casi una hora al abrigo de una lámpara con una bombilla de bajo consumo, casi fundida, y escuchando Radiolé en la minicadena del cortijo. Al poco rato, llegué a la conclusión: me parece que tiene sentido, suponiendo, como Giordano, que uno crea en Dios.

Perdón por el retraso en mi entrada, estaba en otro mundo, corría fresquito.

Un abrazo a todos.

viernes, 6 de agosto de 2010

LECCION DE HISTORIA


Toledo, 15 de Mayo de 1490.

Mi nombre hasta aquella noche era Alfonso Toledano, tengo 17 años, y vivo en las inmediaciones de Toledo. A mi papá y a mi mamá nunca los conocí, según contaba mi hermano, ambos habían sido asaltados en un camino de regreso a casa y habían resultado muertos por unas cuantas monedas de oro. Mi hermano se llamaba Urbano Toledano y era un hombre recto y muy serio, quizás demasiado para un hermano. Era el ayudante principal del párroco local. Dentro de sus oficios estaban el de limpiar cada día las imágenes de Cristo y de la Virgen María que adornaban la Iglesia, ayudar a los confesionarios, y al párroco en todo lo que éste precisase.

Mi hermano siempre iba vestido como un obispo más, solo que con vestiduras algo mas pobres, y con una enorme cruz de color verde en un costado. Siempre se preocupaba de que no nos faltase para comer, pero tenía una costumbre muy rara, cada Domingo, al volver de misa, me llevaba al arroyo que había cerca de casa y me obligaba a bañarme con él, esto es divertido en verano, pero deja de serlo en invierno. Cada vez que yo le preguntaba a mi hermano el por qué de éste baño, el siempre decía lo mismo, cambiaba el semblante de su rostro y ponía una voz muy áspera y fuerte y me decía: ¡hazlo o tendré que castigarte!, así que por miedo a las represalias siempre lo hacía. No entiendo porque le tenía tanto miedo, jamás me puso una mano encima, hasta aquella noche claro.

De vez en cuando mi hermano tenía un mal día, ese día era cuando el llegaba amoratado, como si le hubiesen propinado varios golpes, yo le preguntaba que quién le había hecho tal cosa pero el siempre decía que se había caído de camino a casa, que a él nadie le hacía nada porque era un miembro del clero y pegar a un miembro de la Iglesia era duramente castigado. Pero yo nunca me lo creí, sobre todo porque cuando me llevaba a acostar, y él se quedaba un rato más en el comedor, lo escuchaba llorar durante horas, aunque él lo hiciera bajito para que yo no le escuchase.

Toda mi vida era bajo ésta rutina, hasta que aquella noche y mientras dormía, alguien me puso la mano en la boca, yo con gran susto exclamé: Socorro!, pero pronto mi hermano me mando callar, tranquilo Alfonso, soy yo. Su voz me tranquilizó, pero le pregunté: ¿Qué pasa hermano?, y él me dijo, toma, ponte esto rápido, y ven conmigo. Sobre la cama había unas vestiduras diferentes, era como un vestido blanco, parecido a los camisones que las mujeres usan para dormir, yo no quería ponérmelo, pero la cara de mi hermano hizo que me lo pusiera sin rechistar. Una vez puesto, le seguí hasta llegar al comedor, al lado del horno. Allí mi hermano golpeó con firmeza la pared y una pequeña puerta se abrió justo a la altura de mis pies.


¿Desde cuándo estaba eso ahí?, solo entra, dijo mi hermano. Ambos seguimos todo el pasadizo adelante hasta que llegamos a una especie de recibidor con un pequeño baño, unos libros con letras que no podía diferenciar ni leer, donde otro hombre aguardaba ya allí. Su nombre era Pedro, el agricultor del párroco. Extrañado dije a mi hermano, ¿Urbano, que hace Pedro aquí?, pero mi hermano me miró con una cara que jamás había visto, su cara se había vuelto dulce, feliz, afable, no había seriedad en su rostro, ni rectitud, levantó su mano con gran firmeza y me la puso encima de mi cabeza, creía que podía golpearme pero no, en lugar de eso, un gorrito de color blanco quedó sobre mi cabeza. De repente mi hermano empezó a llorar, yo no entendía nada, y me asusté mucho, mi cara de preocupación debió alterar a mi hermano que pronto me dijo, tranquilo Pequeño Yaacov, ahora estás a salvo. ¿Pequeño Yaacov?, mi hermano debió tomar demasiado vino en la cena, ¿qué estaba pasando?. A mi pregunta respondió Pedro porque mi hermano no podía hablar de la emoción. Verás Alfonso, tu verdadero nombre es Yaacov Ben Arfa, el nombre de Alfonso fue dado a tu persona como cristiano nuevo cuando tú eras muy pequeño, es decir, somos Judíos Yaacov. Tu hermano se llama Levi Ben Arfa y no Urbano Toledano, y yo tampoco me llamo Pedro, mi nombre es Samuel. Tus papás, no fueron asesinados por unos asaltadores, sino que fueron prendidos por la inquisición y sentenciados en autos de fe públicamente. Tu hermano se convirtió como cristiano nuevo para protegerte, y a pesar de que estudiaba para Rabino, tuvo que dejar sus ilusiones para vivir una vida de mentira y así protegerte, tal y como se lo había prometido a tus padres antes de morir. Por eso él era siempre tan serio y parecía mal humorado, porque quería protegerte, que no supieras nada. Pero hoy Yaacov, tu nombre cobra vida, hoy cumples 13 años y es tu Bar Mitzvah, es cuando te conviertes en adulto para ser responsable de tus actos delante de Adonai nuestro D-os. Y de repente mi hermano como pudo y también Pedro, bueno, Samuel, se pusieron a cantar y a orar en un idioma prohibido que yo jamás había escuchado. No sabría deciros qué pasó muy bien, pues no hay palabras que describan lo que sintió mi corazón, ver a mi hermano sonreír, feliz por el y por mí, mirándome con unos ojos que jamás había visto, mientras me sumergía en el baño y hacían mi ritual al son de unas oraciones que no entendía pero que sonaban como los ángeles.

Al salir de allí, mi hermano me contó que estaba obligado a vivir una mentira, que todos los domingos me llevaba al río para lavarme de la comunión que nos daba el párroco, y que si le escuchaba llorar especialmente los Sábados, era porque ese era el día santo para los judíos y el hecho de no poder celebrarlo era lo que le hacía llorar. También si algunas veces venía amoratado era porque los cristianos viejos lo cosían a golpes como método de humillación y castigo por haber sido judío.

Ambos hermanos rompimos a llorar y nos fundimos en un abrazo que me recordó el amor de un padre por su hijo y nos hizo olvidar por un instante todo el dolor pasado.
Ahora dijo mi hermano, al menos de puertas para adentro sabrás que somos judíos y sabrás cómo te llamas realmente, sabrás que ni un solo día he dejado de estudiar las escrituras de Moisés y sabrás que mi amor por ti nunca cesará, por muchos golpes que me den o por muchas humillaciones que me hagan pasar, siempre estaré contigo. Ahora sabrás que cuando nadie te vea deberás ponerte ese gorrito de color blanco al que nosotros llamamos Kipá y que es una señal de respeto hacia nuestro D-os. Y sabrás que tuviste un padre y una madre que dieron la vida por ti, así que ahora lúcelo con orgullo.

Y desde ese día hasta ayer, vivimos con mas amor del que nadie pudo imaginar jamás, y eso es lo que quedará como huella perpetua en mi corazón y eso es lo que no ensombrecerá que hoy 15 de Mayo de 1490, esté triste pero orgulloso justo un día después de que la Iglesia haya capturado, torturado y quemado vivo a mi hermano por ser sospechoso de ser judaizante.

Samuel me dijo que lo torturaron hasta extenuación, pero que se mantuvo firme y no nos delató, me protegió hasta el final, incluso cuando el fuego devoraba su carne se mantuvo firme y solo tuvo palabras de amor para D-os. Hoy me siento tremendamente orgulloso de mi hermano y también feliz, pues hoy se que está descansando. Hoy dejo esta carta para que aquel que la encuentre sepa lo que aquí ha acontecido, pero no para que odie a la Iglesia, sino para que sepa que Hoy mi hermano Levi Ben Arfa es libre, y que yo, Yaacov Ben Arfa, no me siento huérfano pues tengo el honor de haber experimentado el verdadero amor de una familia, amor que perdurará mas allá de lo que perdure esta locura de la inquisición. Amén.


P.D.: Esta carta la leí en el último ciclo de conferencias del Renacimiento de Úbeda y Baeza, donde fui invitado a dar una charla sobre los Judíos en la edad Media. La historia no es real, me la inventé yo con el propósito de hacer así mi pequeño homenaje a lo ocurrido en aquella época, pero ya os aseguro que he leido historias mucho mas duras que ésta y reales como la vida misma.

Nota. Leerse el último Judío de Noah Gordon.



jueves, 5 de agosto de 2010

VACACIONES... ¿Y AHORA QUÉ?


En estos días vacacionales, en los que los clientes dejan de zumbar alrededor demandando más y más trabajo, la habitual hiperactividad sináptica que durante todo el año toma como rehén mi cerebro cesa repentinamente.

El momentáneo vacío de responsabilidades provoca la relajación de cada fibra muscular: se afloja la mandíbula, dejas de fruncir el ceño, y esa presión que atenaza el cuello desaparece milagrosamente... Mente y cuerpo entran en una especie de fase de hibernación.

El tan deseado "plazo bueno" ha llegado por fin... ¿y ahora qué?

Sin duda ha llegado el momento de hacer todas aquellas cosas que has deseado y que tus continuas obligaciones han ido retrasando... Ponerte al día con tus amigos, saber de ellos, de lo que les ocurre... Dedicar un tiempo diario a la lectura, sin tener que robar minutos al sueño... Pasear de la mano de tu pareja, hacer un viaje, probar nuevos platos en la cocina... Pero... no sé... el caso es que... NO PUEDO HACER NADA!!!

No sé si compartís esta sensación, o soy el único que no sabe gestionar adecuadamente sus vacaciones... Y es que la lucecita que permanece encendida en la CPU me recuerda constantemente que en breve debo reiniciarla, y que no muy tarde volverán la hiperactividad, el mal humor y las migrañas.

Habréis percibido sin duda, mis queridos diariantes, que me desmarco del texto literario y profundizo en el terreno de lo estrictamente personal, sin adornos, sin circunloquios... Esperando que estas palabras que deposito en nuestro blog estimulen vuestros comentarios y completen esta sensación de la que os hablo... ¿Qué me decís? ¿Es grave, doctor? ¿Será verdad eso que dicen de que estoy tan acostumbrado a lo malo que lo bueno me molesta?

martes, 3 de agosto de 2010

QUÉ MALA GENTE

Sí amigos.
Hay muy mala gente por ahí. No entiendo como alguien puede disfrutar haciendo daño a otro ser humano.
¿Tan vacías están sus vidas para tener que dedicar tiempo, que por otra parte jamás recuperarán, en pensar cómo fastidiar al prójimo?.
Podrían dedicar el tiempo a disfrutar de la gastronomía, del cine, de un buen libro, de una cervecita en una terraza, ayudando a gente necesitada en Burundi... yo que sé.
Además, qué sabrá nadie de mi vida para tener que tomar decisiones que no le incumben. Como si ellos o ellas no tuvieran suficientes problemas en sus vidas como para encima meterse en la mía.
¿¿¡¡Pero quién le ha dicho al que me manda los miles de correos a la semana que necesito Viagra!!??
Malditos y malditas. Gracias a Dios y a la fuerza que este tuvo a bien darme, el funcionamiento del pistón anda perfectamente engrasado, por lo que les pido tengan a bien volver a contactar con la persona que me manda miles de correos semanales ofreciéndome la pastillita azul para dar vida a mi hermanito, y les digan que no me hace falta, que si me entero yo de alguien ya me pondría en contacto con él, ¿vale?.
Bueno, pues espero que este escrito llegue a quien corresponda.

Hiru-

lunes, 2 de agosto de 2010

RESUMEN DIA 26 A 30 DE JULIO

Perdonad amigos el retraso para mi resumen semanal de artículos, pero desde el viernes estoy sumido en pleno plazo bueno y por ende lejos de la oficina , de mi casa de linares, y de internet; No obstante, debo hacer este pequeño esfuerzo para comentar , aunque solo sea de forma somera nuestros escritos de la semana pasada.

VAMOS QUE NOS VAMOS:

LUNES 26/07/2010.

Vicent, nos lanza un “ peazo de poema” dedicado a la cuestionada fiesta nacional, e invitando a un debate en torno a la tauromaquia , siendo el resultado una suerte de casi 30 enardecidos y apasionados comentarios de varios diariantes, a favor y en contra, plasmados en nuestra tertulia paralela y que son el reflejo de la realidad cambiante que nos esta tocando vivir.
Os deseo a simpatizantes y enemigos , SUERTE MAESTROS.

MARTES 27/07/2010
Cuando hablo del Sr. Di salvo, alias PEPINO, me apetecía hablar de una persona que apareció un dia por mi despacho y me alegró la jornada , porque que me enterneció y me emociono haciendo pensar en aquella hermosa fabula de Roberto Benigni titulada “ La vida es bella”.

MIERCOLES 28/07/2010.

Cualidad, nos regala un escrito que tiene como transfondo la aventura del Dioni, pero que para mi pone de manifiesto que en cualquier momento el ser humano por hastío, por valentía o por desesperación puede cruzar la línea roja que separa el bien y el mal. Pero sobre todo, nos hace pensar en los verdaderos pecadores que desde sus poderosos e inexpugnables altares permanecen enroscados y moviendo Hilos invisibles con los que roban sin parar.

JUEVES 29/07/2010

Por fin mazacote sale de su cueva y nos obsequia con un bello homenaje al refranero popular y demás chascarrillos de la vida. Este tipo ha sabido tejer bajo mi punto de vista un fino traje con el que lucir a estas pequeñas citas muchas de ellas no escritas y otrora importantes cual sabio que guía al ignorante y que lamentablemente se están perdiendo y olvidando con tiempos modernos.
VIERNES 30/07/2010
Sir Erik el joven, se nos consolida como de escritor de novela, al regalarnos una extensa, épica y bien construida historia de fantasía en la que a todos los diariantes nos asigna un personaje de la compañía de la pluma con el fin común de vencer al Grullo en cualquiera de sus formas.
Es un relato de buena presencia y trato agradable, “ voto a Bríos”.

SABADO 31/07/2010.

Para terminar la semana nuestro amigo pequeñito, se desahoga con nosotros escribiendo un profundo ensayo sobre el destino del hombre. Indudablemente su palabras reflejan no tanto el desconsuelo sino la incertidumbre acontecida en su alma al conocer momentos antes el destino de su vida y la de su joven familia para el próximo año y que le llevara como caballero andante que es , a otras nuevas tierras , espero que no tan baldías, en busca del sustento de los suyos .
Pequeñito amigo mío, valor y coraje pero ya no en Gorafe sino en CADIAR, tierra de cuesta y alcaparra.

Ser informático

Cuando pienso que puede que me pase el resto de los años laborales que aun me quedan limando teclas, mi alma se estremece, el escroto se me arruga y la "armorrana" me supura. De ser así, mi columna vertebral se habrá metamorfoseado a alcayata, cual símbolo de interrogación cerrada, el píxel habrá destrozado mis apreciados ojuelos y me habré afofado tanto que puede que ya ni alcance a verme el cipote.

¿Por qué?, dirán algunos. Por que ser programador, además que de por sí es un trabajo que te obliga a estar sentado de la misma postura y moviendo sólo lo que hay de codo para abajo, es el aspecto más complicado y a la vez el menos valorado del desarrollo, por que el que todo funcione perfectamente bien debe ser un hecho, mientras que el diseño que se le aplique es lo que al fin y al cabo vende y entra por los ojos, lo vistoso frente a lo funcional. Su puta madre.

Un programador debe siempre estar aprendiendo nuevos lenguajes en todos los niveles, nuevos sistemas operativos y versiones de estos, nuevas bases de datos, mientras que el diseñador, puede que con mucho una vez al año, decida cambiar de programa para hacer sus diseños.

Y la subcategoría del programador, a su vez, pertenece a la categoría de los informáticos, a los que la gente suele imaginar como un hermitaño, friki, pajillero, candidato a Hikikomori, que solo sabe hablar de ordenadores y de lo que ve y hace en su pantalla, disfruta de esas conversaciones y se muere si se queda sin Internet más de una hora. Que se han muerto, háilos, pero no es el caso de la mayoría.

Si ya las horas laborales pueden resultar tediosas y frustrantes (que no siempre, pero con cierta frecuencia) agreguemos, amigos lectores, el resto de horas fuera del trabajo del incauto informático, al que por el simple hecho de serlo, puede aparecérsele derrepente el vecino, al que en todos los años que conoce solo le ha dedicado dos frases, muchísimas veces, sí, pero dos: "Buenos días/tardes/nohes" y "Hasta luego".

Y el vecino, pensando que va a alegrarte el día, o sudándole los cojones, te suelta alguna pregunta del tipo: "a lo mejor sabes por qué no me funciona bien el Feisbuk desde que tengo cuatro barras de búsqueda en Internet Explorer", "¿para eliminar totalmente un virus tengo que formatear también la papelera de reciclaje?", "¿sabes diseñar una estantería con el Autocad?", "Si meto Mi PC en la papelera de reciclaje, ¿Se formatea el ordenador sin perder las fotos de mi perro?". Y a ver cómo te libras sin reirte, mandarlo al carajo o acabar en su mesa, llena de migas de pan, pelos y otros restos corporales, fregando un ordenador que pide la eutanasia a base de mensajes de error, y aguantando el chaparrón de conocimientos esturreados que ha leido en alguna revista informática, mientras te enseña la colección de aplicaciones "PC Megaguay Gigatrónico" del año 1999 como un tesoro*.

Tenemos también al amigo que casi ha descendido al nivel de conocido, que hace siglos que no ves ni hablas con él, pero que tiene tu número de teléfono. Y te llama. Da igual la hora que sea, o que estés comiendo o durmiendo. No sabes quien es por que ya ni tienes su número, y la conversación es: "¡Eh! ¿Que pasa? ¿Cómo va la cosa? Ea... Pues que tengo el ordenador hecho una mierda.", pa zumbar y no echar gota.

Y agreguemos, como no, la cultura informática popular, y algunas de las normas que ya escribí en otra ocasión:


  • Cuando en la pantalla aparezca un mensaje informando de la importancia de los archivos que se dispone a eliminar, ignórela. Elimine y si algo falla, entonces llame al informático.
  • Si el informático intenta explicarle algo aburrido de algún programa, ignórelo. Nos gusta escucharnos a nosotros mismos, una y otra vez.
  • Si al pulsar un botón, un enlace o intentar imprimir algo, el ordenador no reacciona, reinténtelo 40 veces más. Cuando el ordenador empiece a echar humo, entonces llame al informático.
  • No use las ayudas de los programas. Si tiene un informático cerca o en su agenda del móvil, llámelo mejor a él.
  • Procure instalar en su ordenador cualquier cosa que vea en Internet y que no sepa para qué sirve realmente. No hay nada más divertido para un informático que la limpieza de un ordenador repleto de estas aplicaciones.
  • Nunca de las gracias a un informático. Les encanta su trabajo, y encima cobran por ello.
  • Si se encuentra a un informático durante el fin de semana, o de vacaciones en la playa, por favor háblele de cualquier problema que haya tenido con su ordenador. No sabe cuanto echan de menos ese tipo de conversaciones.
  • Si piensa en comprar un ordenador nuevo, pregunte a un informático. Así si alguna vez el ordenador le da problemas, podrá exigirle a él explicaciones, en vez de a la tienda donde lo compró.

Qué oficio éste... Un albañil puede que haga algunos favores a quien le salga del pijo, pero no va a estar siempre arreglando desperfectos "by the face" mientras comentan la nueva línea de Planas y Palustres, creo yo.

En fin, no tomen sus mercedes este monólogo como depresión laboral por falta de metas, ilusión y remuneración. Aun puedo decir que me gusta mi trabajo, aunque intuyo que dentro de no mucho es más que probable que aplique un volantazo y cambie de dirección, aunque quién sabe hacia dónde...

Mensaje de error

Gracias por su tiempo.



* Absolutamente todo lo contado en ese párrafo es experiencia.