viernes, 29 de octubre de 2010

Lo mejor de no ser alto

-Nunca llegará a molestarte el travesaño de una puerta, todas las del mundo están hechas para tí.
-Es difícil que la cama se acabe de largo. Respecto al ancho, depende de lo que te arrimes.
-No te costará trabajo pasar bajo una mesa, en una comilona, dejando sorprendidos a todos los invitados y abochornando a tus familiares que, con seguridad, culpan tal demostración de destreza al alcohol o derivados.
-Al bailar la conga podrás conseguir mejores marcas que tus oponentes.
-Si te caes, el golpe es menor, el suelo está más cerca.
-Cuando abrazas a alguien te dejas elevar en sus brazos, recordando la  infancia.
-Todos los coches son perfectos. De hecho, si montas en uno alto, puedes sentir por un momento, artificialmente, la sensación de superioridad.
-Cuando tienes que dejar algo en el suelo, doblas la raspa bien poco.
-Podrás pasar sin dificultad por debajo de banderitas publicitarias, señales de tráfico o machones traicioneros.
-Nunca te pedirán ayuda para bajar algo de un altillo.
-Los ojos suelen coincidir con la más voluptuosa de las virtudes en altas hembras.
-Atarse los cordones es bien sencillo.
-Podrás ayudar a caminar a tu hijo, sobrino o similar sin perder la rabanilla.
-La lluvia tardará más en mojarte.
No obstante, pese a todo lo anterior, desearás ser un poco más alto durante toda tu vida.

4 comentarios:

  1. Además, se hace más llevadera la dura tarea de enganchar una jarra helada del congelador para llenarla de la fresca bebida dorada que diseñó el hombre, por la Gracia de Dios.

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  2. Ademas, yo añadiria que los bajos al tener el centro de gravedad mas cerca del suelo son gente ideal para coger y transportar sacos de cemento de 50 kg, teniendo ademas, mas posibilidades de de no romperse la espalda y pedir una baja por accidente.

    Por cierto, que susto me he llevao, pues no que ha aparecido la virgen en nuestro blog y se nos ha hecho seguidora nuestra. MILAGRO, MILAGRO

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  3. La única desventaja es que a los bajitos les arrastra el escroto por el pavimento, o lo que viene a ser el forro de los cojones, según se quiera ver...
    Pero esa fricción termina por curtir el pellejo... y el carácter.

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  4. Los bajos tenemos muchas ventajas e inconvenientes. Los altos, sobre todo los que ya son muy altos, de tan altos, se termina por no poder verlos. Respecto a los sacos de cemento: bienaventurados aquellos que giren con uno a cuestas sin conocimiento ninguno, vuelta tras vuelta, porque podrán ver a la virgen. MILAGRO, MILAGRO.

    David, gracias por comentar y que viva la cerveza fresquita.

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